-Disculpe, ¿Puedo hacerle una pregunta?
-Obviamente sí. Ya lo está usted haciendo.
-¡Oh!…, sí, sí, claro, usted perdone. ¡Ejem!, Entonces… ¿cómo se gana usted la vida?
-¿Ganarme la vida?... no sé a qué se refiere. La vida me la gané cuando me nacieron sin preguntarme.
-Hmmm... Creo que no me ha entendido, déjeme preguntárselo de otra manera. ¿A qué se dedica?
-A vivir.
-Ah, ya, claro, pero… ¿Qué hace, es decir, en qué invierte su tiempo?
-No le entiendo. El tiempo no se invierte, caballero. Siempre es hacia adelante.
-¿Qué?... ah, bueno, sí… quiero decir, ¿Qué hace para,… en fin, qué hace?
-Dejo que la vida viva a través de mí.
-….Oiga, no responde usted a mis preguntas.
-Tal vez no haga usted las preguntas adecuadas.
-¿Ah, no?
-En realidad, ni siquiera parece usted tener sus propias respuestas. Así no encontrará nunca las preguntas.
-¡Es usted un impertinente!
-…Gracias, caballero. Ahorita, si me permite, tengo que seguir atardeciendo con el día.
19 Dejaron su rastro:
Yo creo que nadie entiende ya en qué consiste vivir.
Perdóneme pero voy a fundirme con un café.
Abrazos
Unas preguntas muy anodinas para unas respuestas tan lúcidas. Para calificarlo de rareza tiene mucho sentido común. Yo ya hace un ratito que me he fundido el café.
···ser·siendo···
seguiré amaneciendo... :)
besos y abrazos!
Sois geniales...
A mi este tipo de preguntas me suenan huecas, y son tan habituales que las gente las toma con churros si hace falta, me refiero a ese "a qué te dedicas", si de verdad respondieramos desde el corazón, creo que el preguntón se arrepentiría de haber hecho la pregunta.
A veces he ensayado una respuesta tipo, guasona pero certera, y una vez, solo una la puse en práctica. No más.
Me pasé por el roto y te digo lo mismo "no se admiten preguntas"
No pienso justificar mi exitencia.
Me ha sorprendido leerte hoy aquí. Ayer mismo hablaba de las muchas veces que preguntamos, yo también he caído en eso, ¿qué haces? ¿de qué vives?
Parece que si no tienes, no eres. Y realmente las preguntas sobran. Se es, y punto.
Abrazos
me hizo acordar a esa viñeta de Fontanarrosa. A Inodoro Pereyra le preguntan: ¿Usted cómo se gana la vida? Ganarle? Apenas si le saco un empate.
Me encantó, Kum*!
Jajajajaja, Sandra me sacó de los dedos la respuesta.
Ganarse la vida. ¡Qué poco feliz esa frase! Como si uno viviera en una batalla constante donde todo se trata de ganar o perder.
Sólo se trata de vivir.
Insisto, son ustedes geniales. Geniales.
Es buenísimo niño!!! Y con esta rareza no he llorado ni nada jajajajaja. En serio, GENIAL!! Besos-Vida.
Hola, Carlos: Te dediqué un pequeño homenaje en mi blog. Luego vengo a leer por acá.
Besazos,
PABLO GONZ
Creí que había dejado un comentario pero blogger se lo habrá comido. Así que insisto. Es fácil responder a preguntas convencionales con respuestas convencionales. A veces el que pregunta ni siquiera quiere una respuesta. Se pregunta por cortesía, ¿cómo estás?, bien. Y al primero no le interesa y el segundo necesita alguien a quien contarle sus problemas pero ninguno lo hace. Buffff vaya rollo, esto te pasa por preguntar jajaja
Saludillos contestones
Joder, tardé en llegar, pero me alegro de haber venido. Este es uno de los micros más inteligentes que he leído nunca. Sólo puedo aplaudir y aplaudir. El 15M está en buenas manos. Sigo atardeciendo aún un poco.
Abrazos enormes,
PABLO GONZ
Me han dao un "premio" y las normas dicen que hay que avisar alos nombrados, hecho.
Un besazo!!!
Lo obvio de la existencia es lo que menos se comprende. Somos así y no tenemos remedio...
Buen texto. Te debo una botella con un mensaje dentro. Lo sé.
Un beso, del magenta al negro.
Joer, Kum*. Mira lo que escribí hace algún tiempo
Creativo y revolucionario. Aunque acabo de conocerte, gracias por volver y continuar compartiendo.
de preguntones y respondes está hecha la vida.
La eterna cuestión. ¿cómo te ganas la vida? Yo con el sudor de mi frente solo hago bikram.
A veces no hay ganas de responder porque es mucho mejor seguir atardeciendo.
Publicar un comentario
Deja aquí tu rastro...