miércoles, 8 de septiembre de 2010

Ira.


Un portazo a destiempo lo echó todo a perder. Tú ya no estás y yo… lo entiendo.

9 Dejaron su rastro:

Susana Pérez

La relatividad del tiempo, la relatividad del entendimiento.
Muy bueno

Anita Dinamita

Vas enlazando una cosa con otra... como quien no quiere la cosa, ¿abriendo el alma?
Menos mal que se fue a tiempo (y no a destiempo)
Abrazos

Anónimo

Prosa sucinta, como debe ser. Sigo leyéndote.
Un abrazo,
PABLO GONZ

Kum*

Bueno, Su... casi todo es relativo. Un portazo... es un error, también casi siempre.

Abriedo el alma?... sí, Ana, siempre. Al menos intentándolo. Siempre.

Besos de miércoles a las dos.

Bienvenido, Pablo. Un placer verte por aquí. Gracias.

Puck

Que duro es entender ciertas cosas, ciertos portazos de la vida. Aunque creo que, si lo entiendes, es que no es un error.
Saludillos

Ausencia Silenciosa

Y a mí me ha dolido un poquito leer esta entrada...

Qué manera de expresar TANTO con tan pocas palabras!

Kum*

A mí me dolió escribirla...

Bienvenida y gracias por tus palabras, Ausencia. Siéntete en casa.

Ana Belén García Sánchez

Cierto que son un error los portazos, y cierto también que es un error no darlos en el momento adecuado en la vida...

Mon

A veces es necesario un portazo para comenzar a entender...la visión desde el otro lado de la puerta, aunque alguien quede atrás...es liberadora. Sí, creo en la importancia de algunos portazos.

Besos sin puertas.

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